Kinderdijk y sus molinos
Uno de los emblemas más reconocidos de Holanda son los molinos. En su eterna lucha contra el avance del agua, estas construcciones representan una parte constitutiva de su cultura y su tradición. Kinderdijk, a 16 kilómetros de Rotterdam, es el pueblo con más molinos de todo el país: 19 de estos símbolos holandeses están dispuestos estratégicamente, conformando un panorama único que congrega turistas de todo el mundo.
Los molinos de Kinderdijk fueron construidos alrededor de 1740 para drenar el exceso de agua de los pólderes de Alblasserwaard. Hoy en día se conservan en excelente estado, gracias a los trabajos de la Werelderfgoed Kinderdikj, una fundación que se encarga de su preservación, al igual que del mantenimiento del terreno circundante. En 1997, estas magníficas edificaciones fueron reconocidas como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
Para recorrer la zona y conocer de cerca cada molino, hay varias opciones. Una de ellas es caminar o montar en bicicleta por las numerosas sendas que fueron dispuestas para tal fin. Dadas las cortas distancias que separan a los molinos, esta es una gran oportunidad para disfrutar del paisaje y visitar las edificaciones libremente.
Otra posibilidad es realizar una excursión en bote. Una embarcación sigue el camino de las aguas a lo largo de la costa, donde se encuentran las edificaciones. En treinta minutos de relajante navegación se conocen todos los molinos de Kinderdijk.
Agosto es un mes muy indicado para visitar Kinderdijk: cada sábado, todos los molinos son puestos en funcionamiento y los visitantes pueden ingresar a ellos para observar su funcionamiento. La fuerza del viento mueve las aspas, que a su vez accionan las ruedas de grandes palas que recogen el agua y la devuelven a su cauce.
Estos gigantes son evidencias históricas de la estrecha relación que la población holandesa mantenía con las fuentes acuíferas naturales que circundan su territorio. Una visita tradicional y una invitación indeclinable para el asombro.
Información práctica sobre los molinos de Kinderdijk
- Entrada: adultos, 3.50 euros; niños de 6 a 16 años, 2.00 euros; menores de 6 años, gratis.
- Horarios: todos los días, de 9.30 a 17.30.
Información práctica sobre los paseos en bote
- Billete: adultos, 3.00 euros; niños entre 4 y 9 años, 2.50 euros; menores de 4 años, gratis.
- Horarios: desde las 10.00 hasta las 17.00.
- E-mail: jcvmolentocht@kpnplanet.nl
Foto Vía: trekearth.com

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