Harlingen Harbour Crane, hotel en una grúa
Antes de la llegada de internet y las nuevas tecnologías casi nos teníamos que guiar por la intuición para reservar un buen hotel. Apenas teníamos datos de él y, por supuesto, nada de fotos para podernos hacer una mínima idea. Había que realizar la reserva por teléfono preguntando en esa llamada todos los detalles y los servicios con los que contaba el establecimiento.
Hoy todo ha cambiado. Podemos elegir en muy poco tiempo el alojamiento que más se ajuste a nuestras necesidades. Ya sea familiar, íntimo, de cinco estrellas o un albergue, somos nosotros los que decidimos. Pero a todo esto se le añade el hecho de que también los hoteles han ido variando con el paso del tiempo. Ahora, sin ir más lejos, podemos dormir incluso hasta en una grúa…
¡Has leído bien!, en una auténtica grúa. Se trata del Harlingen Harbour Crane, un hotel construido en una grúa de 1967 junto al muelle de esta ciudad, a poco más de una hora en coche al norte de Amsterdam. La grúa estuvo en funcionamiento hasta el 2001 y, en el 2003, abrió sus puertas, perfectamente rehabilitada a tal efecto, como alojamiento. Está situada a 17 metros sobre el muelle y, claro, desde la habitación se tiene una magnífica perspectiva de todo el puerto y la ciudad de Harlingen.
El aspecto exterior es sencillo: una grúa, sin más. Si no conocéis el hotel pasaréis por allí sin percataros de que aquello pueda ser algo más que una grúa. Sin embargo, la cabina es una lujosa habitación que podría aparecer en cualquier gran hotel de una gran ciudad. No le falta un solo detalle y cuenta con todos los servicios necesarios para pasar una estancia de lo más original.
Hasta la habitación se sube por medio de un ascensor, desde el que ya comienzan a observarse unas vistas fabulosas. Una vez arriba tenemos la posibilidad de ser nosotros mismos los que, a través de un fácil sistema, movamos la grúa para disfrutar del paisaje en todo su esplendor. Lógicamente no parece que sea un hotel apto para los que sientan vértigo.
Tan exótico lugar para hospedarse tiene un precio que ronda los 320 euros por noche la habitación doble. Un capricho, sin duda, para los más curiosos, pero que sin duda os llamará poderosamente la atención.
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